Thais Helena Maingon Zambrano se une al Centro de Estudios Latinoamericanos Arturo Uslar Pietri
La Socióloga Thais Helena Maingon Zambrano fue nombrada directora del Centro de Estudios Latinoamericanos Arturo Uslar Pietri, estructura que resguarda y honra el legado del ilustre venezolano y busca promover estudios, investigaciones y publicaciones relacionadas con la realidad económica, social, política y cultural de América Latina.
Egresada de la escuela de Ciencias Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello, Maingon Zambrano se especializó en sociología y ha dedicado su vida profesional a la investigación y la docencia. Asimismo, posee un Ph.D en Ciencias Políticas de la UCV, donde formó parte por casi 40 años del Centro de Estudios del Desarrollo de la UCV (CENDES-UCV).
Fue en la casa donde se vencen las sombras donde desarrolló su carrera profesional. «Allí aprendí todo lo que se hoy en día. Empecé como asistente de investigación y finalicé como Coordinadora de Investigaciones. (…) Desde el CENDES y en el pasado, se desarrollaban muchas investigaciones que eran la base de la docencia en los posgrados que allí se dictan, estas investigaciones en muchos casos se hacían en alianzas con otros centros de investigación del país o internacionales, también se hacían investigaciones con algunos organismos de las Naciones Unidas, como del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), así como con algunos ministerios del ejecutivo nacional, como lo fueron Cordiplan, Ministerio de la Familia, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo». Sus líneas de investigación forman parte del área de la ciencia política como análisis de los procesos electorales y sus resultados, calidad de la democracia, participación política y política social, específicamente, políticas de salud en Venezuela.
También ha participado en proyectos internacionales del Instituto Latinoamericano de Ciencias Sociales (ILDIS), de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO-Ecuador), del PNUD, UNFPA. Asimismo, trabajó en un proyecto de dos años con el Institute of Development Economies-JETRO de Tokyo-Japón.
Tras el anuncio de su promoción tuvo sentimientos encontrados pues considera que ejercer el rol de directora del CELAUP es «un desafío, un reto para lo que ha sido mi carrera como docente y como investigadora ya que nunca me pasó por la cabeza dirigir un centro de estudios, ni ser directora de nada, y por el otro lado, siento miedo, temor de no poder hacer las cosas bien, de no poder cumplir las actividades pautadas, de lo difícil que será llevar adelante un plan de actividades en la situación actual, caracterizada por la pandemia mundial, desde un país con hiperinflación, declarado en emergencia humanitaria compleja, con una crisis multidimensional que se lleva por delante a todas las instituciones, lo que incluye al sector universitario, entre otros como el sector salud, educativo en general. Eso me da mucho temor. Me asusta la situación del país, me asusta mucho».
Sin embargo, ya cuenta con una lista de proyectos durante los primeros meses de su rol como directora del centro como darle visibilidad, tanto nacional como internacionalmente al mismo; «reactivar y construir las alianzas y redes académicas; conectarlo con otros centros de investigación con objetivos similares; planificar actividades como seminarios, foros o cursos cortos; reactivar y desarrollar relaciones académicas entre profesores de las escuelas de la Unimet y los estudiantes; fomentar y apoyar trabajos de investigación dirigidos a estudiantes de pregrado y postgrado, así como también apoyarlos en la elaboración de sus trabajos de grado».
Thais Helena Maingon Zambrano se une al samán en tiempos de la Covid-19, una pandemia que afecta al mundo, pero que se traduce de una manera en particular en Venezuela, lo que hace que el desafío sea mayor. «Pensar en temas que sean de interés académico, en estos momentos es muy difícil. Todos estamos resistiendo, buscando maneras de sobrevivir, de solucionar los problemas de los servicios públicos que en estos momentos se hacen más indispensables que antes de la pandemia, estamos casi todo el tiempo en casa, necesitamos agua, luz, gas, una buena conexión de internet, teléfono para poder funcionar lo mejor posible. Nos sentimos huérfanos de Estado, de instituciones. Superar todo esto es una tarea difícil. Se hará lo que se pueda y un poquito más».