Sergio Rosales: Es imprescindible tener un ambiente como la Unimet, donde sobran los ejemplos a seguir
El profesor Sergio Rosales siempre tuvo madera para la investigación; desde el desarrollo teórico de un proyecto hasta la puesta en práctica del mismo. A su juicio, la ingeniería permite justamente acceder a nuevos conocimientos, también “permite aplicar los nuevos o los existentes, y materializarlos en tecnología para mejorar los procesos, equipos y la sociedad”, y esta fue razón suficiente para abrirse paso profesionalmente en esta área.
“Estudié ingeniería para dejar mi aporte al desarrollo de conocimientos, lo cual he contribuido con los trabajos y patentes realizadas, esperando seguir aportando al conocimiento y al desarrollo de tecnología”, comentó.
Ingresó a la Universidad Metropolitana en el año 2019, dictando una sola asignatura. Sin embargo, poco a poco sus materias fueron aumentando y actualmente dicta: Mecánica de fluidos, Principios de procesos industriales II y Laboratorio de fluidos y transferencias. Desde el 2020 tiene la responsabilidad de formar parte del Consejo de Escuela de Ingeniería Química, además de ser tutor y jurado de varios trabajos de grado.
Asimismo, Rosales equilibra su misión como docente junto con su rol investigativo, faceta que lo ha llevado a desarrollar aplicaciones que sirvan de herramienta para las investigaciones, como por ejemplo, “el análisis de imágenes para el cálculo de ángulo de contacto, para el estudio de mojabilidad de fluidos en superficies, lo cual es aplicado en cosméticos, alimentos, entre otras”.
Experiencia y desafíos
Su meta sigue firme, seguir “desarrollando las líneas de investigación sobre generación de conocimientos”, un presente y futuro que augura siga siendo en la casa naranja, la cual le ha brindado la oportunidad de explorar estos campos.
Entre los trabajos que contempla están “la reología interfacial dilatacional, comportamiento de mezcla de surfactantes en condiciones dinámicas, generación de tecnología de sistemas dispersos y desarrollo de aplicaciones para la enseñanza de la ingeniería”.
Al igual que sus colegas, Rosales asevera que el mayor reto que ha enfrentado como docente fue el confinamiento por Covid-19.
“Fue un reto el proceso de enseñanza durante la cuarentena, fue necesario emular la presencialidad, por ejemplo en los talleres de ejercicios, se requirió tener simuladamente una llamada por Meet para cada grupo por separados tal como se realiza en clase presencial donde los estudiantes se sientan en equipos, de esta manera los estudiantes podían interactuar y apoyarse, junto con el docente emulando la presencialidad. También diseñé aplicaciones para virtualizar el laboratorio de fluidos y transferencias, con el cual se realizó una copia virtual de cada equipo físico del laboratorio, del cual tuve el honor de recibir el premio Lyezer Katán en Innovación Educativa. Gracias a vivir en esta época de la historia, tenemos los recursos para afrontar este reto que es educar a distancia de manera amena y de calidad”, agregó.
Aportes
Sobre sus enseñanzas, durante el trimestre el profesor transmite a los jóvenes la importancia de las asignaturas en el mundo laboral y su vida profesional. “Al inicio del trimestre les hablo de la importancia que tiene la asignatura y su aplicación en la vida laboral, y a lo largo del trimestre, la relación de cada tema con el mundo profesional, lo que espero es que ese mensaje sea recordado en los momentos que lo necesiten en su vida profesional y personal, que recuerden la clase y aplique en lo visto en la resolución de problemas”.
De igual forma, siente que su aporte a la casa naranja no se limita a educar, también a retribuir con un valor agregado cada faceta que desarrolla en la Unimet.
“Todas las experiencias profesionales que he tenido me han servido para que se lleven un valor agregado a cada asignatura, como por ejemplo el uso de MATLAB en la vida profesional, la aplicación de las matemáticas, de esta manera los estudiantes no solo se llevan el conocimiento del curso, también el adicional del desarrollo de aplicaciones para ingeniería en MATLAB. A nivel de laboratorio, mejora en la infraestructura de los montajes experimentales y en los manuales de equipos, con la ayuda de la Universidad, el Departamento de Energía y Automatización, Planta Física, y del profesor Miguel Pérez; el profesor José Barriola y el señor Luis Morón, que tanto me ha enseñado; así como también al señor Ismael Gouveia y a la señora Rosa León, juntos como equipo. Fuera de las aulas, por ejemplo, un grupo de estudiantes que están motivados a realizar investigación sin que esté relacionada con el trabajo de grado. Nos reunimos semanalmente para discutir artículos de investigación y desarrollo de metodología; también he invitado amigos que trabajan en centros de investigación que nos han dictado charlas. Es decir, lo relacionado con el proceso de investigación es de destacar que esta actividad nace desde el espíritu de los estudiantes, entre ellos Nicolle Giraud y Santiago Camaran”.
Por último, agradece a la Unimet por cambiar su vida, haciéndolo cada día un mejor profesional. “El reconocimiento de los estudiantes como profesor es un combustible inagotable, en este sentido tuve el honor de recibir la Medalla del Centro de Estudiantes de Ingeniería Química este 2022. Cada personal de la universidad es de excelente calidad, y estar rodeados de ejemplos a seguir, motiva a ser mejor, es imprescindible tener un ambiente como la Unimet, donde sobran los ejemplos a seguir”, sentenció.