Profesor Emérito Javier Ríos, una vida dedicada a la Academia
En los espacios del Paraninfo, el pasado 20 de julio, autoridades, decanos y profesores se congregaron para celebrar el conferimiento del título de Profesor Emérito a Javier Manuel Ríos Valledepaz, descrito por la Facultad de Ciencias y Artes y la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, como un “singular docente, investigador, gerente académico, y ante todo universitario que ha dedicado buena parte de su vida al crecimiento y fortalecimiento de la Universidad Metropolitana como institución de educación superior de excelencia”.
El reglamento de distinciones honoríficas de la Universidad Metropolitana establece que dicho reconocimiento se otorga “a profesores con veinte o más años de servicios sobresalientes en la docencia o en la investigación”. La rectora encargada Mary Carmen Lombao explicó durante su discurso que el profesor Ríos no solo cumple con el tiempo estipulado, sino que duplica la cifra: ha prestado sus servicios a la Unimet por más de cuarenta años, y además es el “segundo profesorado emérito conferido por la Universidad Metropolitana en toda su historia, y su postulación emana de dos facultades”.
Oriundo de La Coruña, España, Ríos egresó de la Universidad de Santiago de Compostela como licenciado en Matemáticas en el año 1977. Dio sus primeros pasos como profesor en 1980, cuando al llegar a Venezuela se unió al Colegio Cristo Rey de Caracas como profesor de matemáticas, y más tarde ingresó como profesor de matemáticas y física en el curso propedéutico de la Universidad Metropolitana.
Más tarde, en 1985, ingresó a la Escuela de Matemática de la Unimet, donde impartió clases de cálculo, álgebra lineal, matemáticas discretas, álgebra III para los estudiantes de Ingeniería, de Ciencias Administrativas y de Matemáticas Industriales.
Pese a que en su juventud nunca estimó dedicarle tantos años a la vocación docente, asegura que fue la satisfacción que le proporcionaba la vida académica la que lo impulsó a mantenerse. “Siempre me ha gustado la docencia y la investigación, y aunque tuve otras alternativas de trabajo decidí quedarme en la universidad porque era la forma de llevar a cabo una carrera de docencia e investigación”, explica Ríos.
Postulación
“El profesor Javier Ríos ha mantenido ininterrumpida su labor docente en pregrado y postgrado en nuestra institución durante 40 años, ha dirigido más de 30 trabajos de grado y cuenta en su haber con publicaciones, en matemáticas, en educación matemática, y numerosas en el área financiera; ha sido Decano de la Facultad de Ciencias y Artes y, antes, Jefe de Departamento de Matemáticas para Ingeniería y Coordinador de la Maestría en Ingeniería Gerencial, y en estas posiciones se caracterizó por ser gerente académico exigente, motivador y transmitir los valores unimetanos con su ejemplo”, reza el documento.
Los miembros de la Facultad de Ciencias y Artes, y la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, aseguran que Ríos está siempre dispuesto a “robustecer la institucionalidad”.
Entre sus contribuciones a esta alma mater, Ríos ha colaborado y participado en las asociaciones universitarias como APUM y CaPUM, en diversas comisiones académicas y administrativas, “al tiempo que ha estimulado la participación de colegas en la vida universitaria en ámbitos diversos: desde los Consejos de Facultad y Consejo Académico hasta en los Congresos de investigación y creación intelectual”.
Asimismo, conformó el grupo de investigación en Finanzas, alianza que todavía coordina y que ha arrojado resultados cuantificables y positivos que se ven reflejados en trabajos de maestría, comunicaciones y artículos publicados. Además su vocación se extiende a la mentoría de estudiantes de pregrado, de postgrado y de colegas.
El esfuerzo hoy se ve traducido en una mención importante que asegura no imaginó ni es sus “mejores sueños”. “Afortunadamente la universidad ha sido muy generosa conmigo”, insiste.
La emoción que lo embargó al enterarse del reconocimiento alega que fue muy grande y que todavía “dura y me llena de orgullo”.
40 años de felicidad
Durante la ceremonia, evento al que el profesor y su familia asistieron mediante una videoconferencia por la plataforma Zoom, la emoción de Ríos se reflejaba en lágrimas.
A los jóvenes que hoy sienten en sus venas el ímpetu de la enseñanza, Ríos les invita a perseguir su meta. “Como todo en la vida se requiere de mucho esfuerzo para lograrlo, no bastan los sueños hay que perseverar para conseguirlos”.
A la Universidad le agradece la generosidad que le han brindado durante estas cuatro décadas, y asegura que la Unimet es su “segunda familia”. “Me siento muy orgulloso de llevar en ella más de 40 años y sin lugar a dudas es un privilegio muy grande pertenecer a la Universidad Metropolitana”.
Por su parte, Lombao asevera que “Javier Ríos ha estado plenamente convencido y no ha cesado en convencer a otros de que la Universidad Metropolitana es una gran universidad y que escatimar esfuerzos desde el quehacer de cada uno para que cada día sea mejor, resulta una mezquindad injustificable. Su visión de esta Universidad en el largo plazo siempre ha sido una brújula que ha orientado sus acciones, sus motivaciones, sus argumentaciones y sus decisiones y ha influido en el pensar y actuar de otros”.
Palabras de la vicerrectora académica, Mary Carmen Lombao
Palabras de la jefa del departamento de Matemáticas, profesora Lida Niño