Los días 8 y 9 de octubre se llevó a cabo en la Unimet el III Simposio Venezolano de Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria, organizado por la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (Acfiman), con el apoyo de la Universidad Metropolitana, la Universidad Simón Bolívar, la Universidad Central de Venezuela y la Academia de la Ingeniería y el Hábitat.
En sus palabras de bienvenida, el rector Benjamín Sharifker, recordó que el cambio climático sin duda debe mucho a la actividad humana y al consumo de combustibles fósiles, por lo cual ya muchos países se han volcado al uso de energías alternativas y se impone la reconversión de la economía petrolera.
“El que no seamos ahora uno de los principales productores de petróleo del mundo, nos da la oportunidad de que no dependamos ya del oro negro, sino de la materia gris, para reconvertir nuestra economía”, afirmó.
Por su parte, Ismardo Bonalde, primer vicepresidente de la Acfiman, al hacer recuento de los simposios anteriores y otras actividades relacionadas con cambio climático organizadas por la institución, hizo un llamado al actual gobierno y a los que le sigan a invertir en la investigación científica como base de la promoción del desarrollo del país.
La Conferencia Magistral de apertura, bajo el título de Cambio climático y seguridad alimentaria, estuvo a cargo de Carlos Machado Allison, en representación de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales.
Para Machado Allison un elemento clave para hablar de cambio climático en Venezuela es el derecho a la propiedad. Si no se es dueño del suelo que se cultiva el agricultor piensa en el provecho de un día y no en el futuro. “Donde hay firmes derechos de propiedad existe seguridad alimentaria, riqueza y procura de soluciones ambientales”.
Otros ponentes de este III Simposio fueron Patricia López Calcagno, por la School of Biological Sciences University of Essex, Reino Unido (Optimización del proceso de fotosíntesis como estrategia de seguridad alimentaria), y Edilberto Guevara, quien intervino vía teleconferencia a nombre de la Asociación Peruana de Ingeniería Hidráulica y Ambiente, la Universidad de Carabobo y la Academia de Ingeniería y del Hábitat. Su trabajo se tituló Agua para la agricultura.